Libertad religiosa en Marruecos: ejemplo de libertad y tolerancia
Cualquier persona que llegue al Reino de Marruecos con los ojos abiertos, podrá observar con la absoluta claridad el respeto, tolerancia y libertad religiosa en paz y solidaridad
RPRESS Pedro I. Altamirano. Málaga, 26 de noviembre 2022.- SM Mohammed V fue llamado por las autoridades coloniales de la Francia de Vichy para pedirle la lista de los Judíos marroquíes, ya se pueden imaginar ustedes para qué. A ellos respondió SM que en Marruecos que en Marruecos no había judíos, cristiano o musulmanes, que sólo había marroquíes, y que con mucho gusto le haría llegar el censo nacional de todos los habitantes del Reino.
Pudiera parecer un arrebato de patriotismo, pero no lo es. No voy a entrar en debatir si fue antes el huevo o la gallina, pero en la España musulmana ya se toleraban todas las religiones, tradición de tolerancia que nos llegó de un Islam aún muy joven y en pleno desarrollo. Ello ayudó a desarrollar un Islam tolerante en la península ibérica, por mucho que los totalitarios del pensamiento único españolista, herederos del ínclito Cardenal Cisneros, se nieguen por sistema a reconocer.
Cuando los Reyes Isabel y Fernando terminaron por unificar bajo la corona de Castilla y Aragón toda la península, judíos y musulmanes fueron respetados en vida de la Reina Isabel, al Cesar lo que es del Cesar. Fue a la muerte de Isabel cuando el déspota vividor a la sobra de la faldas de la Reino, Fernando de Aragón, se hizo con el poder absoluto del reino por encima de los intereses de la heredera natural del Reino, Juana I de Castilla, llamada de forma injusta e interesada como “Juana la Loca”. Con la ayuda de Cisneros, cuando se tramó el complot para traer a Carlos, mientras que incumpliendo todo lo acordado en Santa Fe (Granada) para incorporación del Reino de Granada al de Castilla, comenzaron las expulsiones de todos los musulmanes y judíos que no se convirtieran al catolicismo.
Todos estos que fueron obligados a marcharse de sus tierras con sólo aquello que pudieran llevar con ello, fueron recibidos por los sultanes de Marruecos como verdaderos hermanos e integrados con absoluta normalidad. Entre ellos muchos cristianos que nada quisieron saber del absolutismo católico reinante en la España dejada por Fernando y Cisneros. Católicos que fueron del mismo modo recibido e integrados en el gran sultanato de Marruecos.
| Su Santidad el Papa Francisco y SM Mohammed VI en Marruecos.
Por ello, cuando SM Mohammed V, contestó a los Franceses que en Marruecos no había judíos, cristiano ni musulmanes, solo continuó con la tradición de tolerancia heredada de todos los sultanes y dinastías marroquíes. Una tradición de respeto que se ha sabido respetar y aumentar con los siglos. Tradición que se ha ido agrandando con SM Hassan II y hoy con SM Mohammed VI, que repite que el Reino de Marruecos es el protector de todas las religiones, de todos los creyentes.
Hoy Marruecos, a pesar de los negacionistas de la verdad, es un ejemplo de tolerancia y respeto religioso que contradice y desmiente a aquellos que confunden el Islam con terrorismo y totalitarismo. El respeto a los demás, la paz y la tolerancia son la base del Islam, al que hay que acercarse con completa libertad de pensamiento y mente. Para un Católico creyente como yo, basado en mis fuertes convicciones cristianas, me permito acercarme a las demás religiones con el ánimo de aprender y compartir paz. Aquello que odian a otras religiones es que no creen en aquella que procesan.
En Marruecos me encuentro con ese espacio de libertad. Puedo compartir mesa, tertulias, proyectos, vida con musulmanes y judíos, porque nos une la libertad, la tolerancia que aportan a los seres humano el profundo conocimiento de lo propio y la curiosidad de lo ajeno. Ese espacio es que Marruecos permite desde la libertad, no ya de sus gobernantes o soberanos, sino de la que emana del pueblo.
Iglesias, catedrales, conventos, mezquitas, madrazas, sinagogas, cementerios musulmanes, judíos, cristiano conviven con absoluta naturalidad. Con tanta naturalidad que logran pasar desapercibidos. Es importante por ello mantener siempre la vista atenta, los sentimientos en la piel y el alma abierta para disfrutar del espacio intercultural, religioso y de libertad que se vive en todo el Reino de Marruecos, sin duda, reserva mundial de la tolerancia y respeto religioso.