La OTAN debe tomar medidas contra la banda armada Frente Polisario como primer paso para la estabilización de Sahel
No es serio que un país como España, miembro importante de la Alianza Atlántica, siga dando refugio a una banda terrorista que, como en el caso del Polisario, es uno de los principales actores del terrorismo en el Sahel.
RPRESS Pedro I. Altamirano. Málaga, 31 mayo 2022.- España ha celebrado cuatro décadas de su entrada a la Alianza Atlántica, con unos actos conmemorativos en los que han participado, además del actual Secretario General de la OTAN Sr. Jens Stoltenberg, SM Felipe VI, el actual presidente del gobierno español Sr. Pedro Sánchez, y una nutrida representación del ala socialista del Gobierno y los embajadores de los 30 países aliados.
En su discurso, SM Felipe VI recalcó «España comparte de forma plena, y en este preciso momento todavía más, la importancia crucial de mantener una sólida disuasión y defensa en nuestro flanco oriental». Además recalcó que España está contribuyendo a «hacer efectivo ese compromiso» al reforzar las capacidades militares en el este de Europa. «Pero nuestra seguridad colectiva también requiere que la Alianza preste cada vez más atención a los desafíos de la dirección estratégica sur, donde el terrorismo de matriz yihadista amenaza directamente a nuestras sociedades y, además, donde otros actores —estatales y no estatales—, que no comparten los valores presentes en la Carta de las Naciones Unidas, lo intentan hacer de forma indirecta».
Esta referencia de SM Felipe VI con respecto al terrorismo yihadista, de forma especial en el Sahel, debiera ser tomado en cuenta el presidente Sánchez, que en base a los acuerdos con aquellos “amigos” y “colaboradores” de la banda armada Frente Polisario, colaboran de forma indirecta a mantener el terrorismo en el Sahel. No es de recibo que un presidente español celebre los cuarenta años de pertenencia a la Alianza Atlántica, que además acogerá en Madrid para su asamblea general el próximo mes, y al mismo tiempo, siga permitiendo que una banda terrorista se refugie y financie en España con dineros públicos.
En este aspecto es de resaltar, que ninguno de los socios del gobierno Sánchez ha asistido a los actos de conmemoración de los 40 años de pertenencia a la OTAN, ni socios de gobierno, ni de aquellos partidos que le dan apoyo en el Congreso de los Diputados, dejando a las claras el distanciamiento del gobierno con sus socios, y que lleva al actual gobierno hacia un callejón en la que la única puerta de salida es la convocatoria de elecciones generales.
Con la vista ya puesta en las próximas elecciones, y más de los resultados que puedan cosechar en las elecciones andaluzas, en las que se le pronostica un verdadero desastre electoral, el gobierno está obligado a girar su política actual de gobierno si no quieres desaparecer del mapa político español. Uno de esos cambios urgentes que debe tomar es romper con sus actuales socios de gobierno que lo tienen maniatado en muchas políticas, para de forma posterior, romper los lazos que le puedan quedar con el régimen militar argelino, y la banda terrorista Frente Polisario, expulsarlos de España, cerrar sus sedes y cortar de inmediata toda financiación.
Sólo así podrá volver a la coherencia, y presentarse en la cumbre de la OTAN como un país serio, que lucha contra el terrorismo del Sahel, y sigue la vía de la libertad y la democracia que se busca en la Unión Europea y la OTAN. En caso contrario España seguirá siendo un miembro para la OTAN pero poco fiable.