España – Marruecos un antes y después
La cumbre que se celebrará los uno y dos de febrero en Rabat marcarán un antes y después en las relaciones bilaterales.
RPRESS Pedro Ignacio Altamirano. Málaga, 29 enero 2023.- España y Marruecos, digan lo que digan algunos enemigos de la verdad, están hermanadas desde el principio de los tiempos. En mi libro “El Sáhara marroquí” queda más que claro, que no sólo es compartir geografía, que ya es importante, sino cultura, lengua y tradiciones.
Nuestra historia está ligada de forma tan longeva e íntima, que hay que estar ciego para no reconocerlo. Es más, una de las frases “malditas” para muchos españoles “hiperventilados” como la expresión del “África comienza en los Pirineos” siempre tratada con desdén, el escritor portugués Luis de Camões: «Mudam-se os tempos, mudam-se as vontades. Todo mundo é composto de mudança», es por ello por lo que la citada frase de «África empieza en los Pirineos» sufre variación copernicana a en «África renace en los Pirineos».
“África renace en los Pirineos” preciosas palabras que describen una bella realidad, sólo manchada por la intolerancia y escasez de mente de los ultranacionalistas de “sangre pura”. Con más precisión, muchos intelectuales aseguran, y con razón, que todo lo que ocurre en el Magreb tiene su repercusión en España. Ello no es nuevo, ocurre desde el inicio de los tiempos de Hércules, Tartessos o la mítica Atlántida.
España y Marruecos, el espíritu Atlante
En ambas orillas habitamos Atlantes. Ello nos da el carácter, la tolerancia que emana la sabiduría, la paciencia para la reflexión, y el amor infinito por la paz basada en la cultura del debate constructivo. Para mí, siempre he dudado mientras cruzo el estrecho si voy o regreso a casa ya que del mismo modo si somos el Norte de Marruecos, o Marruecos es el sur de Iberia. ¡Qué más da! cuando comparto un té en el Café Colón de Tánger. Los Atlantes poco entendemos de fronteras.
Durante tantos milenios de historia en común, se ha ido afianzando la afinidad de lo cotidiano en base a lo que somos. Arquitectura, música, gastronomía, artes, y el infinito amor a la vida. Ello no ha evitado que, como humanos que somos, hayamos tenido desencuentros a través de la historia, pero siempre, de un modo u otro, la sociedad civil de ambas orillas ha sabido estar por encima de los acontecimientos políticos y militares. Siempre hemos sabido aguantar los envites con esperanza en el futuro.
España y Marruecos: Ahora o nunca
No volvamos la vista atrás. Estamos en el momento que estamos. La sociedad civil toma cada vez más relevancia tal como avanza el siglo. Ello debe ser, es determinante para las nuevas relaciones entre ambas orillas. Pasar de tomar un Café y hablar de lo que nos une, debe pasar a ponernos en pie y exigir a nuestros respectivos gobernantes, españoles y marroquíes, que dejen las diferencias a un lado, y centre el esfuerzo en fortalecer lo que nos une.
Los próximos días uno y dos de febrero se reanudan los encuentros bilaterales al máximo nivel entre ambos gobiernos. Una reunión importante por todo lo que significa. Por un lado reanudar unos encuentros paralizados, por diversos motivos desde 2015, por otro el importante e histórico cambio de posición española con respecto a las provincias del sur del Reino de Marruecos y por último por la importancia de la fortaleza bilateral tanto para las relaciones Norte/Sur Mediterráneo/Atlántico e Iberoamérica.
Hay que tener presente del mismo modo, la desastrosa gestión del Sahel por parte de Francia, que deja a pairo y en medio de un grave conflicto, a la importante zona geoestratégica para la seguridad, la lucha antiterrorista, el narco tráfico y la inmigración.
España y Marruecos están obligadas, y por tanto deben comprometerse para asumir la responsabilidad de la gestión del área sahariana. Un compromiso duro, difícil, complicado y comprometido que necesitará de la colaboración más amplia posible. Ello debe llevar emparejado acuerdos que fortalezcan tales responsabilidades a todos los niveles, tanto en lo económico, colaboración en defensa, lucha por el incremento del desarrollo de los derechos humanos y la prosperidad en el área.
Ello conlleva del mismo modo, un pacto no menor, sino determinante me atrevo a denominar, que comprometa a la sociedad civil de ambas orillas. El reto ya ha sido recogido por actores sociales en el denominado “Pacto de Settat” que se firmará días después del encuentro bilateral hispano marroquí. El pacto tendrá como resultado el primer Foro de diálogo social permanente hispano marroquí que desarrollará al máximo el intercambio y desarrollo de ambas sociedades.
España y Marruecos como punto de encuentro
Una reunión al máximo nivel que se celebrará en la hermosa ciudad de Rabat, que sin duda traspasa las fronteras. España y Marrueco son la puerta del Norte para Marruecos y el Sur para Europa. Del mismo modo son la puerta del Mediterráneo y el Atlántico con su mirada siempre puesta en Iberoamérica. Una responsabilidad que hoy debe ser asumida por ambos gobiernos no solo ambos países, sino para millones de personas que nos miran atentos y con esperanza. Asumamos todos nuestras responsabilidades.