Podemos da la espalda a Marruecos

RPRESS Pedro I. Altamirano. Málaga, 12 enero 2023.- Podemos es la imagen que más daño hace, sin duda, a la izquierda democrática. Esa izquierda que debiera representar a la siempre humilde, en el mejor sentido de la palabra, honesta y comprometida clase trabajadora, a la que, en vez de defender, humilla de forma constante.

Son muchos los datos que apoyan este desastre tan cutre. Claro ejemplo el de la ministra de igualdad, la “podemita” Irene Montero que, con el mayor presupuesto de la historia, ha conseguido en tiempo récord, que España pase de ser el quinto mejor país del mundo para las mujeres al catorce, o que los malbaratadores y violadores salgan antes de las cárceles. Otro ejemplo es el de la ministra de “derechos sociales” Ione Belarra, empeñada en beneficiar a unas minorías en contra de los intereses de las mayorías, sino en destruir a la familia, centro histórico de la sociedad. De este modo podría estar escribiendo, para el prestigioso Guinness, récords de los ministros, ministras  de podemos para su famoso libro.

Como lo de Podemos es llamar la atención de los, cada vez menos “suyos”, en política internacional van “por libre”. Mientras el gobierno de España intenta restañar las profundas heridas producidas con las más que importantes relaciones con el Reino de Marruecos, a partir del esperpéntico caso “Ghali”, que costó la dimisión de miembros del gobierno y la escapada de Pablo Iglesias, Podemos repito, a lo suyo: apoyar a los terroristas del Polisario, que a tantos trabajadores españoles asesinaron y torturaron, que siguen manteniendo presos en los campos de Tinduf a los pocos saharauis marroquíes que allí quedan, mientras usan a sus niños para el entrenamiento terrorista, y a mujeres y niñas como esclavas sexuales. Muy digno todo.

Cuando por fin da su fruto, las intensas negociaciones diplomáticas bilaterales, para lograr un esperado e importante encuentro entre ambos gobierno, y recobrar la normalidad en unas buenas e intensas relaciones hispano-marroquíes, encuentro que se celebrará en Rabat los días 1 y 2 de febrero, y en la que participarán una decena de ministros de cada gobierno, los de Podemos dicen que no van.

No sé si es por, y esto lo pongo siempre en la “presunción, en lo que puedo yo pensar dentro de la libertad de pensamiento y expresión que me ampara la Constitución” el pago debido a las “ayudas” de terceros, o por esa afición al teatro que tanto les gusta. La cuestión es que viaja el gobierno de España a unas importantes relaciones para muchos trabajadores, y ellos, todo “modernos” y “falsos progres” dicen que no van. Lo peor es que, y eso también lo subrayo, el Presidente Sánchez no los cesa a todos, no ya sólo por deslealtad al propio gobierno, sino a los interese generales de España.

Al mismo tiempo, muchos, repito lo de la presunción “asalariados de la pluma” a las “presuntas” órdenes de oscuros intereses de terceros contra Marruecos están preparados. Me refiero a los “Cembreros, Carrión o Moreno”, siempre con la pluma cargada contra el Reino de Marruecos por lo que sea, ya sea verdad, mentira o media mentira, y del mismo modo “machacar” a todos aquellos, que defendemos y defienden las buenas relaciones bilaterales, ya tendrán los procesadores de textos cargados de toda la “mala leche” ¡huy, perdón! de “mala tinta” contra todo lo bueno que pueda traernos, repito, tan importante reunión hispano marroquí.

Allá ellos. El mundo no para. La reunión será un clamoroso éxito del que muchas empresas de ambos países y sus trabajadores saldrán beneficiadas; las relaciones triangulares Marruecos e Iberoamérica relanzada y la seguridad del Mediterráneo y Europa más fortalecida por la lucha conjunta contra el terrorismo del extremismo yihadista. Todo esto es lo importante, y en lo que nos debemos centrar y alegrar. Los demás que sigan ladrando a paso firme de la relaciones bilaterales.