Omar Hilale: Indivisibilidad de la responsabilidad del «polisario» y de Argelia por el crimen de guerra del reclutamiento de niños
El grupo separatista armado Polisario y Argelia son corresponsables del reclutamiento de niños en los campamentos de Tinduf. Por lo tanto, son culpables de crímenes de guerra", dijo Omar Hilale, embajador representante permanente del Reino de Marruecos ante las Naciones Unidas, durante su intervención en el marco del Coloquio Internacional organizado por la Comisión Nacional de Derecho Internacional Humanitario, bajo el tema "la protección de los niños durante las crisis humanitarias", celebrado el miércoles en Rabat.
RPRESS Rabat, 23 marzo 2022.- El embajador Hilale destacó, en su declaración centrada en «el Derecho Internacional y los niños soldados», los progresos realizados en las normas internacionales de protección de la infancia en las tres décadas transcurridas desde la entrada en vigor de la Convención Internacional sobre los Derechos del Niño de 1989, señalando que estos instrumentos internacionales han clasificado como crimen de guerra el reclutamiento o alistamiento de niños en fuerzas o grupos armados.
En este sentido, lamentó que a pesar de la existencia de este arsenal normativo internacional vinculante -convenios internacionales, resoluciones del Consejo de Seguridad y el Estatuto de la Corte Penal Internacional- y no vinculante -resoluciones de la Asamblea General de la ONU y los Principios de París de 2007 y los Principios de Vancouver de 2017- que enmarcan la protección de los niños en tiempos de conflicto, los de los campamentos de Tinduf en Argelia siguen siendo explotados impunemente como niños soldados por el «polisario».
Hilale ilustró sus observaciones con fotos y vídeos auténticos que muestran el entrenamiento militar al que son sometidos los niños de estos campamentos por el «polisario». Mostró las similitudes en las técnicas de entrenamiento, reclutamiento y adoctrinamiento para la violencia armada que utilizan el «polisario» y grupos terroristas como Daesh y Al-Qaeda.
También destacó las diferencias entre el destino pacífico y prometedor que se ofrece a los niños en los bancos de las escuelas del Sáhara marroquí y el de la violencia y el terrorismo para el que el «polisario» prepara a los niños en los campamentos de Tinduf, en el desierto argelino.
También invocó las disposiciones del Derecho Internacional para demostrar la indivisibilidad de la responsabilidad del «polisario» y de Argelia en el reclutamiento de niños de los campamentos de Tinduf.
Hilale denunció el silencio cómplice, incluso la incitación de Argelia a este crimen de guerra, que se perpetúa desde hace décadas en su territorio, y ello en total violación de sus obligaciones internacionales derivadas de los instrumentos de los que es parte, y que le imponen el imperativo de proteger a estos niños.
Argelia, añadió, es aún más culpable al persistir en la negativa a censar y registrar a los refugiados de los campamentos de Tinduf, en violación de la Convención de Ginebra de 1951 sobre los Refugiados y de numerosas resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU, privando así a estos niños de la protección que les otorga el Derecho Internacional Humanitario.
El embajador Hilale llamó a la Comunidad Internacional y a las organizaciones internacionales y regionales para que condenen este crimen de guerra y hagan todo lo posible para proteger a los niños de todas las regiones del mundo, y en particular de los campamentos de Tinduf, contra su reclutamiento militar por parte de los grupos armados, en particular del «polisario».
Por último, Hilale formuló una serie de recomendaciones al Coloquio para la aplicación de medidas de prevención y protección de los niños frente al reclutamiento, entre ellas la de asegurar el registro de los niños en los campamentos de refugiados y garantizar su acceso a la educación. También pidió medidas firmes y urgentes de rendición de cuentas contra todos los que incitan, fomentan o participan en el reclutamiento de niños en conflictos armados.
Además, recomendó que la prestación de asistencia humanitaria se vincule al pleno respeto de los derechos del niño y que se excluya de la asistencia a cualquier grupo armado culpable de adoctrinamiento y/o reclutamiento de niños.