Argelia vuelve a utilizar a España para sus mentiras con las vacunas en Tinduf.

RPRESS Pedro I. Altamirano. Málaga 14 diciembre 2021.-  «El Ministerio de Asuntos Exteriores de España trabaja para encontrar el mecanismo más eficaz, para enviar vacunas contra la covid-19 a los campamentos saharauis, que lleguen a la población y que puedan ser inoculadas». Con estas palabras, según informa EFE, han contestado a la pregunta realizada por el senador de la formación de izquierda Compromís Carles Mulet había preguntado al Gobierno español por qué España no ha donado aún ni una sola vacuna a los territorios del Sáhara Occidental, pese a que la región se considera “prioritaria” en la estrategia de “vacunación solidaria” definida por el Ejecutivo.

Todo perfecto e ideal, muy solidario, tal y como es el pueblo español en su conjunto, sino fuera por que con fecha 10 de abril de 2021, la misma agencia EFE se hiciera eco de que “Saharauis reciben de Argelia el primer lote de vacunas e inician inmunización”  ¿Qué engaño es este? En la nota se informa que “Argelia entregó hoy al gobierno de la República Árabe Saharaui Democrática (RASD) el primer lote de vacunas contra la Covid-19 en el marco de una campaña conjunta para acabar con una enfermedad que ha contagiado a 353 personas y causado 20 muertos en los campos de refugiados”

En la ultima resolución de Naciones Unidas R/RES/2602 (2021) de 29 de octubre 2021 en la que muestra su preocupación por “los efectos de la pandemia del Covid-19” entre la población retenida en los campos de Tinduf.  Que alguien me lo explique bien. Según se calcula las organizaciones pro banda armada del Frente Polisario, recibe 23 millones de euros de las distintas administraciones públicas (que ya tiene tela financiar a una banda armada que ha atentado contra la vida de centenares de españoles) ¿dónde va a parar ese dinero? Para alimentos, no; para vacunas por lo visto tampoco, entonces solo queda un lugar de destino: los bolsillos de los dirigentes, sus familiares y financiar atentados terroristas.

Por otro lado, Argelia presume de ayudar y mantener a los retenidos en los campos de Tinduf. Presume de vacunar, pero la verdad tiene un recorrido corto, y a la vista está de todos, que no han vacunado más allá de los mismos que se quedan con toda la ayuda humanitaria.  Eso sí, para armamento y combustible para los terroristas del Frente Polisario nunca falta.

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