¿Es esta la imagen de una activista por los derechos humanos, o la de una terrorista violenta? Sultana Khaya al descubierto.
RPRESS Pedro I. Altamirano. Málaga, 20 noviembre 2021.- Al sur de Marruecos, allá donde la belleza del Atlántico se incrementa con el increíble paisaje de la planicie y dunas blancas, existe una bruja que se dedica, como buena bruja, a asustar, mentir con malas artes, ofrecer manzanas envenenadas, robar el alma de los niños que pilla a su alcance, y siempre al servicio de los dioses del mal, a los que sirve a cambio de limosnas y un poco de publicidad.
Por ello pido, con humildad a la “bruja piruja” y todas las brujas buenas que con tanto arte y gracia, distraía a los niños españoles con cuentos llenos de magia, rimas imposibles y bondad infinita, por manchar su nombre mezclándola con esta bruja de la manda disfrazada de mujer saharaui.
Como a todas las brujas, a la bruja Sultana se termina el tiempo a manos de la verdad, porque como se suele decir, se puede mentir a una persona toda la vida, o a muchos por poco tiempo, pero no se puede mentir a todo el mundo para siempre. Esto es lo que le está comenzando a pasar a Sultana, que como a todas las brujas malas, se les deja de creer, de tener miedo y mueren a manos de la luz de la verdad. A Sultana se le ha terminado el tiempo, lo único que le pasa, es que como cobarde que es, no encuentra el valor para mirarse al espejo. Que no se preocupe, ya se lo ponemos nosotros.
Sonrojo al ver sus fotos con boquilla pediátrica, encima despistada y descuidada, ya que cualquier persona sabe diferenciar una boquilla pediátrica de una de adulto, pero a ella le da igual hacer el ridículo. Vergüenza ajena siento cuando veo esos maquillajes de tercera categoría comprados en los zocos al precio más barato para simular agresiones de películas de serie B. Y ya lo último me ofende como ser humano defensor de la igualdad entre hombre y mujeres, pero sobre todo, de su dignidad, cuando se atreve de decir que la han violado por quinta vez, quizás quiera engañar a los del Record Guinnes para que le den alguna propinilla más. Esto me ofende porque ofende la lucha de las mujeres maltratadas, violadas y asesinadas de verdad. Un verdadero insulto a la humanidad.
Tiene suerte Sultana de vivir en Marruecos protegida y cuidada de que no le pase nada. Suerte tiene Sultana de ser Marroquí y disfrutar del respeto que, la policía marroquí, dispensan a las mujeres. Suerte de ser Marroquí y vivir en un país donde la conocen, y en vez de tomar medidas judiciales por sus mentiras, difamaciones e insultos, vive en libertad. Sí liberta y seguridad que le ha permitido ir a votar a la lista electoral de su primo en las últimas elecciones municipales y legislativas y municipales marroquíes el pasado ocho de septiembre como una marroquí más.
Hasta aquí la broma de la “bruja piruja” porque más allá de la broma o el cuento, hay personas que sufren en los campamentos de Tinduf para que esta mujer viva como una diosa internacional. Ha llegado la hora de terminar con este circo mediático digno de Sálvame de Lux, y desenmascarar a nivel internacional a este personaje indigno. En este aspecto resalto la valentía y claridad del Embajador de Marruecos ante las Naciones Unidas Sr. Omar Hilale por dejar claro quién es esta mujer.
En efecto, Hilale ha declarado que «Con respecto a la llamada Sultana Khaya en particular, cabe preguntarse desde cuándo los activistas de derechos humanos han estado en uniforme militar, con el Kalashnikov al hombro», preguntó el embajador marroquí. Del mismo modo, el Sr. Hilale presentó pruebas contundentes al Consejo de Seguridad, en forma de fotografías que mostraban a este separatista, a sueldo de Argelia y del Polisario, con uniforme militar y empuñando un Kalashnikov”.
El Sr. Hilale continuó desenmascarando a Sultana de forma rotunda a los miembros del Consejo de Seguridad «esta persona no es un activista pacífico de derechos humanos, sino un activista del grupo armado separatista Frente Polisario, que ha participado en varios cursos y ejercicios, de los que se desarrollan en los campos de Tinduf, en Argelia” y agregó que Sultana Khaya» llamó y sigue incitando a la violencia armada contra la población civil en el Sahara marroquí «. Un claro ejemplo de carácter violento de esta mujer.
Los saharauis no merecen que se les insulte de tal modo. Los saharauis marroquíes están indignados, y doy fe de ello, con la actitud chulesca, mentirosa y dañina de Sultana. La intervención del Sr. Hilale, debe ser el comienzo del fin de la historia como actriz de reparto, ser desenmascarada como lo que es, y esperar que sea devuelta al interior del espejo mágico, donde ningún ser humano debiera mirar nunca, condenándola al olvido eterno de la memoria de las personas.
Dice Cristóbal Halffter que el ser humano «vive mientras alguien, por el motivo que sea, le recuerda y muere cuando todos le olvidan», olvidemos a Sultana Khaya, para que deje de existir.